1843
Calle Mosqueta, esquina a calle San Esteban
Por lo insólito de la situación y la gravedad de los hechos ocurridos,
los sucesos acontecidos en el verano de 1843 dejaron una huella permanente en
Sevilla cuya memoria se conserva en uno de los títulos que figuran en el escudo
de la ciudad.
Los descontentos generados por el gobierno del Regente Baldomero
Espartero, general de Infantería y en posesión de varios títulos nobiliarios,
entre ellos el de Duque de la Victoria, alcanzaron su máximo climax cuando
disolvió las Cortes en Mayo de 1843.
En Sevilla un grupo de habitantes se manifestó pacíficamente y
desarmado el 11 de junio en apoyo de la Constitución y de la reina Isabel II y
fue reprimido brutalmente por un regimiento de Caballería. El Ayuntamiento de
la ciudad se opuso abiertamente a esa manera de proceder, creó una Junta
Interina de Gobierno y comenzó a preparar la defensa de la ciudad mediante
obras de fortificación, incremento de la Milicia Nacional y organización de servicios
hospitalarios.
La respuesta fue muy dura, Espartero ordenó al general van Halen
situarse en Alcalá de Guadaira con sus Divisiones de Caballería y desde el día 18
de julio la ciudad fue sometida a un intenso bombardeo de artillería. El día
23 el propio general Espartero llegó a
Sevilla al frente de un numeroso cuerpo de ejército compuesto por diecisiete
batallones, nueve escuadrones y seis piezas de artillería.
Dispuesto a terminar con la rebelión intentó conseguir una rendición
que no fue aceptada. Tras la firme negativa, el día 24 inició un nuevo ataque
con artillería de grueso calibre que continuó en días sucesivos. Ante el uso de una fuerza tan desmedida el Ministerio
de la Guerra ordenó a Espartero el día 27 que suspendiera la acción so pena de
ser declarado traidor de la patria.
Al día siguiente el general abandonó su puesto de mando y emprendió
una huida hacia el Puerto de Santa María desde donde días después embarcó para
Inglaterra, país en el que permaneció exiliado hasta 1848.
Muchos fueron los daños producidos en los bombardeos, sobre todo en el
barrio de San Bernardo y en la zona este de la ciudad, desde de la puerta de la
Carne hasta la del Osario; fueron numerosos los muertos y heridos y los edificios
destruidos o dañados por las más seiscientas granadas artilleras que fueron
disparadas contra la ciudad.
De aquellos proyectiles todavía queda constancia en varios lugares,
algunos no llegaron a explotar como el que figura en la foto de la calle
Mosqueta, otro en la calle Levíes en la casa donde nació Miguel Mañara, que
pertenece actualmente a la Junta de Andalucía, un tercero en el patio del
Archivo de Indias y un cuarto, que sí explotó, en una de las azoteas de la entonces
Fábrica de tabacos (actualmente Universidad) donde un azulejo recuerda el
suceso con el siguiente texto: En
el sitio y bombardeo que sufrió esta ciudad, por haverse alzado y negado la
obediencia al regente del Reyno Duque de la Victoria, cayó y rebentó una bomba
en este sitio a las doce del día 22 de julio de 1843.
La memoria de este hecho histórico queda perpetuado en el escudo de la
ciudad al otorgarle Isabel II, en los primeros días del siguiente mes de
agosto, el título de Invicta por su
defensa durante el conflicto.
A pesar del comportamiento que tuvo el general Espartero con Sevilla, la ciudad mantiene todavía una de sus más céntricas plazas rotulada con el nombre de Duque de la Victoria, según acuerdo del Ayuntamiento en 1841 cuando fue nombrado Regente.
https://www.juntadeandalucia.es/export/drupaljda/61eeea49827f6-Dxptico_may_2013.pdf
https://www.us.es/actualidad-de-la-us/testigos-de-la-historia-el-bombardeo-de-sevilla-de-1843-sigue-presente-en-la-us
https://atlasinsolitus.com/lugares/la-bomba-en-la-calle-mosqueta/
Referencias bibliográficas:
— PRONUNCIAMIENTO Y ASEDIO DE SEVILLA. JUNIO-JULIO 1843. Jesús Viñas Cebrián. Revista "Archivo Hispalense". 1964
— DICCIONARIO HISTÓRICO DE LAS CALLES DE SEVILLA. Ayuntamiento de Sevilla. 1993
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